lunes, 6 de octubre de 2014

Manuel Collado, presidente de Razón y Justicia: “¡Ojalá salga a la luz toda la basura creada durante años por los que se han llamado y se llaman nuestros dirigentes!”


30 septiembre, 2014 | por  | Categoria:  ActualidadPalencia
Manuel Collado es el presidente de Razón y Justicia, asociación creada en Palencia e integrada por 870 afectados por las preferentes de Caja España-Duero, que reclaman la devolución de un total de 26 millones de euros. Fuera de este colectivo, en la provincia palentina hay otros 2.530 damnificados por este tipo de “inversiones”. Entre unos y otros piden un total de 100 millones a la cita entidad financiera.   
En esta entrevista Collado nos habla de los objetivos, iniciativas y desarrollo de actividades emprendidas por parte del colectivo que dirige a raíz de la decisión de la citada caja de ahorros –hoy Banco Ceiss– de retener sus capitales invertidos en participaciones preferentes y obligaciones subordinadas.
De los 100 juicios interpuestos por Razón y Justicia, esta asociación ha ganado todos, recuperando 4 millones de euros. 
Pregunta. ¿Cómo nace Razón y Justicia?
Respuesta. En mayo de 2013 se nos comunica a los clientes de Caja España-Duero que habíamos adquirido productos híbridos (preferentes y obligaciones subordinadas) y que será aplicada una “quita” de los mismos, que oscilará entre un 10 y 67 por ciento del capital inicial, en función a la emisión adquirida. Y, además, que no podíamos disponer del capital restante, en aplicación de la normativa dictada por el Gobierno de España y la Unión Europea, tras las ayudas aplicadas a la entidad, debido a su situación económica de quiebra. Entonces, los clientes nos movilizamos y decidimos crear una asociación en defensa de los afectados de Palencia, igual que antes lo habían hecho en las provincias de León, Zamora y Asturias.  El 7 de junio de 2013 nos registramos como Razón y Justicia y se inició nuestra organización, creando las bases y estrategias sobre lo que queremos y cómo vamos a intentarlo.  El objetivo es claro:  recuperar nuestros ahorros que consideramos han sido robados de forma fraudulenta.
P.  ¿Con cuántos socios cuentan en la actualidad?
R. Somos 870 socios, que hemos abonado una cuota de 20 euros cada uno, y representamos a 2.100 afectados, teniendo en cuenta que con cada socio están implicados 2,4 personas de media (padres, hijos, cónyuge, hermanos,…).
P.  ¿ Razón y Justicia está integrada en otras plataformas?
R. Trabajamos de forma conjunta con todas las asociaciones creadas para la defensa de los afectados de Caja España-Duero y, en total, somos en seis colectivos en las provincias de León, Zamora, Salamanca, Valladolid, Asturias y Palencia.  Entre todos, sumamos unos 6.000 y representamos a cerca de 14.500 afectados.
P.  ¿Qué cantidad de dinero reclaman que les sea devuelta?
R. A nivel nacional seremos alrededor de 37.000 afectados y reclamamos 1.050 millones de euros. En Palencia somos 3.400 afectados y reclamamos 100 millones de euros. Los socios de Razón y Justicia, que somos 870, reclamamos 26 millones de euros.
P. Dicen que ustedes sabían lo que compraban….
R. ¡Es la gran mentira! Como clientes de la entidad creímos en el buen hacer de los empleados, que eran de nuestra confianza, y, al final, abusaron de ella. En otros casos no han contado ni con nosotros, los clientes, y han abusado de su poder para incluso falsificar firmas en los contratos de compra sin permiso. Con esto no quiero decir que un porcentaje, muy pequeño, no supiera lo que hacía… Pero, al final, la justicia se encargará de poner a cada uno en su sitio.
P. ¿Qué pasos han dado para intentar recuperar su dinero?
R. Desde que iniciamos nuestro proceso de reclamaciones hemos ido por caminos diferentes a nuestros compañeros de otras asociaciones.  Nosotros siempre hemos querido un arreglo por la vía administrativa al considerar que hemos sido engañados y defraudados, pues nuestra condición de inversores minoristas nos impedía conocer el trasfondo que se escondía. Primero lo intentamos con nuestra caja, con el Defensor del Pueblo, después con la Comisión Nacional del Mercado de Valores, el Banco de España y el Ministerio de Economía, el Fondo de Reestructuración Bancaria, con Unicaja. ¡Todo inútil! En algún caso creímos ver un hilo de esperanza, pero al final nada.
También consideramos la ayuda de las instituciones y partidos políticos. Hemos contactado con el Ayuntamiento y la Diputación de Palencia, que son los únicos que nos han atendido, algo que agradecemos de verdad, pero ellos no tienen la solución. Quisimos implicar a la Junta de Castilla y León como responsables de la Ley de Cajas; hemos tenido reuniones con responsables de todos los partidos políticos con representación en la región y, salvo casos aislados, como con UPyD e IU, del resto no hemos conseguido nada a pesar de haber contactado con ellos y habernos dirigido a los máximos dirigentes.
Hemos hecho partícipes de nuestras quejas al fiscal general de Castilla y León y a los jefes de la Audiencia de Palencia y de la Audiencia Nacional, quienes nos han atendido y apoyado, pero sin más resultados.
El último intento ha sido con Manuel Azuaga, nuevo presidente de Banco Ceiss, pero Unicaja nunca ha tenido interés en solucionar un problema creado por Caja España-Duero, ya que la solución, sea cual sea, no va a repercutir en sus arcas.
En definitiva, buenas palabras en el mejor de los casos y pocos hechos a la postre, por lo que al final hemos decidido optar por las demandas vía civil.
P. El FROB (Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria) y Unicaja hicieron propuestas que parecían ser la solución. ¿Por qué no las aceptaron?
R. Siempre fueron malas propuestas. El FROB fue el artífice de nuestras “quitas” iniciales y luego quisieron que fuéramos los únicos paganos del problema. Cuando vieron nuestro rechazo ablandaron la postura ofreciendo una especie de “arbitraje” lleno de trampas y que nunca garantizaba recuperar más del 70 u 80 por ciento del capital inicial y eso siempre en el mejor de los casos. Al final a base de presiones y poner más dinero como garantía para que Unicaja se hiciera cargo de Caja España-Duero, consiguieron que un 29% de los afectados firmara sus condiciones. El gran beneficiado ha sido Unicaja, que sin poner un euro ha sabido que con dinero público se tape el agujero de Caja España-Duero, provocado por la desastrosa actuación de sus presidentes y  Consejo de Administración, nombrados por los políticos castellanoleoneses, que durante años han lacrado el futuro de todas las Cajas de Ahorro de la comunidad.  Ellos, los políticos, han querido cerrar sin ruido el asunto, apoyaron, y lo siguen haciendo, la fusión Caja España-Duero con Unicaja y aplaudieron las propuestas, pero, de verdad, dentro de nuestras opciones nunca estuvo aceptar las condiciones del FROB y Unicaja por ser otra trampa sin salida y sin garantías de recuperar nuestros ahorros.
P. ¿Cuánto dinero ha conseguido en ayudas Caja España-Duero?
R. Entre ayudas de España y la Unión Europea, alrededor de 1.200 millones de euros, además del aval del FROB por otros 241 millones de euros para atender las demandas perdidas por vía civil. A nosotros nos resulta llamativo que se hayan inyectado todos esos millones para ayudar al banco y que no se hayan dedicado para ayudar a los clientes que pusimos nuestros ahorros y ahora nos los quieren quitar. ¡Es inaudito! Hay tal descontrol en la gestión, según la auditoría realizada por Oliver Wyman en el año 2012, que Caja España-Duero necesitaría hasta 2.200 millones de euros para salir adelante. Y parece ser que somos los clientes los únicos que debemos pagar los “platos rotos”. Nadie se acuerda de las primas millonarias que se ha llevado el Consejo de Administración durante sus años de permitir y callar. Todos fueron nombrados por los políticos de turno y todo eran favores que había que pagar instalando a los amigos en puestos de llenar bolsillos. ¿Por qué no se empieza por reclamar lo cobrado a tantos ineptos que callaron y no supieron o no quisieron advertir de los riesgos que corríamos los clientes ante los desmanes que se proponían?
P. Y como no encuentran alternativa inician la vía civil.  ¿Cómo van los resultados?
R. En efecto, agotada la vía administrativa y, viendo que todas las puertas se cierran sin remisión, optamos por la vía civil. Para llevarla a cabo desde Razón y Justicia hicimos una selección de 4 bufetes de abogados, elegidos con criterios de calidad y precio y de los que nos sentimos orgullosos, pues los resultados nos dicen que hicimos bien nuestro trabajo. Son los que ofrecemos a nuestros socios, para iniciar la única alternativa viable que nos dejan:  demandas civiles. Algunos empezamos a denunciar en los juzgados en el año 2013, pero la mayoría lo hemos hecho en 2014, siguiendo las pautas marcadas por la asociación. El resultado del primer juicio lo tuvimos en enero de 2014 y en septiembre del mismo año hemos llegado al número 100. ¡Todos los hemos ganado! Y hemos conseguido recuperar 4 millones de euros.
P. Pero aún quedan muchos pendientes…
R. Sí, pero ahora todo irá más rápido. De los 790 socios posibles que podemos demandar, unos 600 hemos presentado la demanda o está en curso de preparación; sólo quedan unos 190 que se lo piensan un poco más por distintos motivos, casi siempre unidos a repartición de herencias, puesta en común de varios afectados, residir fuera de Castilla y León,… Y ahora las base están sentadas, la justicia cada vez lo tiene más claro y se acercan posturas entre juzgados para solventar las dudas. Estoy seguro de que antes de fin 2015 todos los socios habremos terminado nuestro particular sufrimiento.
P. ¿Cuáles han sido los principales logros de Razón y Justicia?
R. Nosotros creemos que han sido muchos, aunque no todos visibles. Hemos conseguido reunir al 26% de los afectados de Palencia en la asociación; hemos concienciado a la sociedad española de lo peligrosos que son los poderes políticos y económicos; hemos obligado a ceder posiciones tanto a la caja como al Estado; y hemos convencido a la justicia de que somos simples clientes engañados. A pesar de lo conseguido no hemos ganado nada en absoluto, pues todo el trabajo realizado sirve para, a la postre, sólo recuperar lo que es nuestro, lo que siempre nos ha pertenecido y lo que una banda de sinvergüenzas se empeña en quitárnoslo.
P. ¿Qué opinión les merece la imputación de los presidentes y directores de Caja España-Duero?
R. ¡Razonable y plausible! Desde el principio dijimos que una trama similar no es casual. Primero los banqueros y después los políticos, o viceversa, son los causantes de base. Si una de las dos castas no quiere, no pasa nada. Que se empiecen a sentar en el banquillo a los denunciados es para nosotros una satisfacción, ya que saldrán a relucir todas las mentiras y desmanes consentidos, al tiempo que otros imputados deberán aparecer, entre los que se encuentran los componentes del Consejo de Administración de Caja España-Duero y, detrás, sus benefactores políticos. ¡Ojalá salga a la luz toda la basura creada durante años por los que se han llamado y se llaman nuestros dirigentes!
P. ¿Hasta cuándo va a continuar Razón y Justicia ayudando a los afectados?
R. En la asamblea que celebramos en junio, decidimos seguir trabajando para los socios hasta julio 2015 y, después, proponer la disolución de la asociación. Pero desde el 7 de julio de este año está cerrada la posibilidad de hacerse socio, porque así se decidió también, aunque seguimos aceptando socios puntuales que llegan rezagados porque nuestra asociación es flexible, sin ánimo de lucro (nadie cobra un solo euro) y con carácter de ayuda. Pero saben los que llegan tarde que su tiempo es menor para la gestión de su caso.  En definitiva, consideramos que a últimos del año 2015 llegaremos al final de esta ingrata aventura.
P. ¿Y después qué?
R. Pues todos deseamos poner fin a este período de cruel sueño en el que nos han metido. La vida tiene que continuar sin sobresaltos, aunque ya se ocuparán otros de buscar nuevos métodos de complicarnos la vida. Pero necesitamos volver a pensar en positivo y olvidar esta pesadilla.
P. Pues les deseamos suerte y que sigan recuperando todo su dinero…
R. Preferimos que nos desee justicia, la solución de nuestro caso no es cuestión de suerte. Y todo nuestro dinero no lo recuperemos nunca porque, a pesar de dictar a nuestro favor, hay un porcentaje que debemos destinar a cerrar el asunto. Además, nadie nos va a compensar por los padecimientos sufridos.
P. ¿Queda algo positivo de todo esto?
R. Sí, los amigos ganados, la ayuda recibida y la satisfacción de contribuir a mantener nuestra dignidad.
Fuente de datos: carriondigital.com

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