Presiones a los afectados

Los afectados indican que Caja España-Duero «presiona» para aceptar el canje

Los afectados por las participaciones preferentes han denunciado que, aunque no es de momento una práctica generalizada, están recibiendo presiones por parte de Caja España-Duero para aceptar el canje de Unicaja y abandonar la vía judicial. Según argumentan, estas prácticas se habrían dado en varias zonas del país, pues todas las plataformas las han denunciado -Asturias, León, Zamora y Salamanca-. Dicen que los directores de las oficinas les están citando para firmar la propuesta ante notario en un plazo de veinte días. La plataforma zamorana recuerda que «no hay que firmar nada», máxime cuando rubricar que se acepta el canje que ofrece Málaga cierra las puertas a la vía judicial.

Las plataformas censuran que esta en una práctica que «coarta» a los afectados porque les llama a aceptar una quita y cerrar la puerta de los juzgados.

Desde Caja España-Duero aseguran que estas prácticas no se están dando porque no se ha dado orden a ninguno de sus directores de sucursal para realizar llamadas a los preferentistas diciéndoles que firmen el canje de Unicaja. De hecho, dicen, hasta que la Comisión Nacional del Mercado de Valores no apruebe las condiciones definitivas de la oferta lanzada desde Málaga no se pondrá en marcha ningún protocolo de actuación ni se informará a los clientes sobre algo que, recuerdan, no ha recibido todavía el visto bueno de todos los organismos pertinentes. Fuentes sindicales citadas por el diario Cinco Días coinciden en la versión de Caja España-Duero pero apuntan que es posible que se hayan producido excepciones puntuales por iniciativa de los propios directores de sucursal.

Cuando Unicaja lance su oferta los preferentistas tendrán un plazo de veinte días para acogerse a ella y, a partir de ahí, Málaga valorará si el respaldo obtenido es suficiente para culminar una operación de fusión que se alarga varios años.